Pesca de costa de pejerreyes en La Cascada del Canal 15

Siempre pendientes de poder dar a conocer datos sobre buenos pesqueros de costa cercanos a nuestra ciudad, los que en realidad lejos están de abundar, un equipo de “Pesca al Día” acompañado por los amigos Juan Bravi, Néstor Sosa y Salvador Lomgobuco decidió llevar a cabo un nuevo relevamiento en la conocida zona del Canal 15 denominada La Cascada.
Los datos que manejábamos con respecto al Canal 15 indicaban que estaba ingresando mucha agua después de las lluvias caídas semanas atrás, lo que a su vez había complicado la pesca sobre todo de flote; aún con este panorama no muy alentador fuimos igualmente y como ya muchas veces nos pasó en este lugar, volvimos con una pesca más que buena.
FACIL LLEGADA
Para llegar al pesquero La Cascada debemos llegar hasta el kilómetro 169 de la Autovía Dos para lo cual hay que pasar el puente sobre el Río Salado, a unos 300 metros de éste tomaremos por el retome hacia la izquierda hasta un cartel indicador de la entrada al camino por el que que recorrer unos 12 kilómetros de tierra que se vuelven intransitables con la lluvia.
La identificación de la entrada al pesquero que pertenece al Club de Pesca Castelli es muy fácil ya que al llegar a una tranquera de color azul se debe ingresar; allí los pescadores son atendidos los señores Izaurralde o González, directivos de la institución a la que la comuna le ha cedido esas tierras para la practica de la pesca deportiva.
El pesquero La Cascada tiene un amplio lugar para acampar y practicar la pesca sobre el Canal 15 a lo largo de unos dos kilómetros; el lugar cuenta con arboledas, fogones y muchos recipientes para los residuos.
El predio tiene además sanitarios con duchas y una pequeña proveeduría en la que se venden desde alimentos a carbón y carnadas.
LA PESCA
Por la mañana cuando llegamos nos comentaron que en la antigua cascada se estaban pescando algunos pejerreyes muy buenos con barranquín, dato que ya nos habían marcado otros pescadores.
Así que fuimos a ese sector en primera instancia, para comenzar los intentos a flote y con barranquín; en el lugar ya había varios pescadores pero según ellos, no pasaba nada.
El viento lo teníamos del sector norte, de frente a nosotros al igual que el sol que dificultaba la visión de los aparejos en el agua.
Comenzamos la pesca empleando líneas de flote de 3 boyas y boyón impulsor, y con barranquín balanceados con un plomo abajo, anzuelos nº 2 además de cañas de 4 metros y reeles frontales cargados con nailon del 0.25 y multifilamento del 0.12. La carnada que utilizamos fue mojarra que no era la ideal para este lugar porque el tamaño grande dificultaría la pesca.
SIN PIQUES
Estuvimos probando aproximadamente 20 minutos; a simple vista se observaba que las condiciones del canal no eran las óptimas porque la fuerte bajante no permitía que las líneas trabajasen adecuadamente y corrían a una velocidad muy rápida como para que los pejerreyes pudieran comer.
Buscamos por diferentes lugares para encontrar remansos pero sin tener ninguna pique; es más las líneas volvían como si estuvieran recién encarnadas.
No quedaba otra que recurrir al único lugar donde encontraríamos algo de tranquilidad en el agua, que no era otro que la costa opuesta, donde la barranca nos daría reparo del viento y el sol nos daría de espalda.
De ese modo, tuvimos que cruzar el Puente de Pascuas y luego caminar unos 300 metros hacia el lado del Río Salado.
En los primeros intentos no teníamos respuestas de pejerreyes probando de cualquier manera ya sea arriba o abajo con barranquín a pesar de que las líneas trabajaban correctamente.
LANCES LARGOS
En un momento Juan cambió el puntero cargado por otro de mayor peso para ganar distancia y tirar al centro del canal. Apenas cayó la línea al agua de registró un pique que, aunque finalmente fallido, se convirtió en la antesala de otro pique que se dio casi de inmediato y que permitió capturar un ejemplar que apenas pasaba la medida.
A partir de ese momento todos practicamos la misma técnica de tirar sobre la correntada y comenzamos a tener muchos piques.
El mejor pejerrey de la jornada pesó seiscientos gramos y fue capturado por Néstor Sosa en su primer intento tirando hacia el centro del canal.
La bajante no paraba a pesar de que, teóricamente, debería estar por comenzar a crecer; el viento norte seguramente fue el causante de este fenómeno. El pique se detuvo y al mediodía decidimos almorzar para proseguir más tarde con las pesca.
POR LA TARDE
Ya por la tarde y a pesar de haber comenzado la creciente, ésta careció de la suficiente fuerza como para aumentar significativamente el caudal y a unos sesenta metros se veía que la caída de agua de La Cascada predominaba sobre la que ingresaba con la crecida.
Buscamos varios lugares como para ver si podíamos capturar algunos pejerreyes más pero fue inútil; solamente un par de pescadores con barranquín a fondo pudieron pescar algunos pero no de gran tamaño ya que apenas pasaban la medida.
EJEMPLARES JUVENILES
Un dato alentador en esta zona del Canal 15 fue haber visto una gran cantidad de ejemplares juveniles de pejerreyes que no superaban los 18 centímetros, así que cambiamos las líneas por boyas yoyo nº 10 y anzuelos nº 7, encarnando con rodajas de mojarras, con lo que nos entretuvimos con elementos muy sutiles para esta pesca.
En conclusión podemos decir que a pesar de no ser la actual la época del año más favorable para el Canal 15, la pesca en La Cascada es aceptable, con algunos pejerreyes de gran porte y la mayoría que llegan a 27 centímetros. Se recomienda llevar aparejos para cuando se da la pesca de pejerreyes chicos a los que por supuesto hay que devolver al agua.
Otra recomendación importante es llamar al pesquero (02241-15-507020) antes de ir para consultar el estado de camino.